Noticiascuriosas.com/Madrid. Dos veces a la semana, Amur, un tigre del zoo de Primorie (Rusia), degusta un suculento menú: una cabra viva. Así era hasta que conoció a Timur, una cabra que se salvó de morir en las fauces del felino al plantarle cara y demostrarle que no le inspiraba ningún miedo.
Los trabajadores del zoo de Primorie se quedaron sorprendidos cuando al introducir a la cabra al recinto del tigre, ésta se rebeló. No solo demostró que no le tenía ningún miedo y estaba tan tranquila, sino que además le usurpó el sitio.
La cabra, que tenía que haber desaparecido en cuestión de horas comida por el tigre, se ha adueñado totalmente del recinto de Amur. Cuatro días después de su llegada, el tigre se ha visto obligado a dormir sobre el techo de su propio recinto.
Lo insólito es que incluso se han hecho amigos. Según cuentan los trabajadores del zoo, cuando la cabra no sabe dónde está el tigre se pone a buscarle y al encontrarse le persigue dando vueltas a todo el recinto.
