Noticiascuriosas.com/Madrid. Tenía uno de los pechos más generosos de Canadá, aunque no nació con ellos. Un canadiense de 55 años lució durante 20 años una buena delantera y todo por una apuesta, que ha había ganado. Decimos lució porque hace unos días se despidió de ellas.
Todo empezó cuando Brian Zembic, a sus 35 años, en 1997aceptó un peculiar reto lanzado por sus amigos durante una comida en un restaurante. Al parecer ese día la novia de uno de sus colegas presumió de su delantera y uno de sus amigos le dijo a Brian que si él tuviera unos pechos así todo el mundo le prestaría atención.
“Soy un jugador y hay muy pocas cosas que no haría por una apuesta”, asegura Brian. Motivo por el que este canadiense retó a sus colegas a decir cuánto le pagarían si él se ponía implantes mamarios durante un año. Como ninguno le creyó, tiraron por lo alto y le ofrecieron 100.000 dólares.
Tras oír la cifra y reflejarse en sus ojos el símbolo del dólar, Brian comenzó a planear cómo llevar a cabo su empresa. Como es un hombre de apuestas, se acordó de un amigo cirujano y apostó con él en una partida de backgammon. Si Brian perdía le daría 5.000 euros, si él ganaba su amigo le pondría los ansiados pechos gratis. Ganó, se puso pechos y logró los 100.000 euros prometidos por sus amigos, que pese a perder se echaron unas risas al verle con semejantes pechos.
El problema es que pasó el año prometido y Brian no quiso despedirse de sus pechos, al haberse acostumbrado a ellos y supuestamente haber aprendido mucho de las mujeres. Y así pasó un año, y otro y otro, hasta 20 con sus ya famosos pechos. Sin embargo, hace tan solo unos días se desprendió de sus implantes gracias a un programa de operaciones de la televisión estadounidense.
