Noticiascuriosas.com/Madrid.-Ver cómo los leones marinos se acercan a los muelles de algunos puertos es un atractivo para muchos turistas, pero en el caso de Vancouver, esta visita estuvo a punto de terminar en tragedia, cuando uno de ellos arrastró a una niña al mar, aunque terminó soltándola, en parte, por la ayuda de un hombre que acudió rápidamente en su ayuda.
El vídeo es impactante, aunque además del hecho -ya de por sí brutal y que merece la pena ser visionado- queremos destacar varios aspectos curiosos añadidos que se pueden ver en él.
El vídeo habla por sí solo. El león marino merodeando la zona, pega un gran salto y acaba mordiendo el vestido de la niña, que está de espaldas y la arrastra hasta el agua, quizás confundiendo unas flores rojas del estampado de su vestido con comida.
Si queréis ir al grano, podéis avanzar hasta el minuto 1:40 para ver ‘la captura’, aunque recomendamos verlo entero.
Pero además, nos llaman la atención tres aspectos. En primer lugar, el gili.. Queremos decir, en primer lugar, el inconsciente que llama al león marino como reclamándole para que salte hacia su mano como si tuviera en ella comida y posiblemente contriibuyó a lo que sucedió poco después.
En segundo lugar, nos parece tremendo que después de que el león marino haya pegado un salto segundos antes, la niña sea tan inconsciente de sentarse en el banco dándole la espalda al animal, y evidentemente más inconscientes son los padres -o la madre al menos, que aparecerá luego en el vídeo-, que estaban a por uvas.
Y por último, nos ha indignado que el héroe del vídeo, el que reacciona a tiempo y no duda en saltar al agua para rescatar a la menor -posiblemente el animal soltó a la niña por la presencia del hombre-, no recibe ni las ‘gracias’ de la madre, que agarra a la niña y pone pies en polvorosa. Vale que con los nervios uno puede no tener los cinco sentidos en las cosas, pero mujer…que acaba de salvarle la vida a tu niña y se ha mojado de arriba a abajo… Por cierto, el pobre hombre hasta se quedó sin gafas de sol (minuto 1:48).
