El jugador portugués de origen guineano Zicky Té marcó este fin de semana el que puede ser el mejor gol del año en el fútbol sala profesional. El partido enfrentaba en el tercer partido de la final por el título al Sporting de Portugal (que en España llamamos Sporting de Lisboa) y al Benfica. Y con empate sin goles en el marcador en la segunda parte, pegado a la línea de fondo, hizo dos genialidades de tacón.
La primera, para regatear con un túnel a su marcador. La segunda, para engañar al portero y batirlo por bajo. Era el 1-0 de un partido en el que su equipo terminaría ganando en la prórroga (3-2) y cobrando ventaja en la serie por el campeonato liguero (2-1) de Portugal, situándose a una victoria del título.
